Realmente no hace falta bajarse del coche para anclar la capota atrás. Vamos, que como el coche no es muy grande que digamos, alargas el brazo y ¡clack! Eso si, para quitar los bastidores claro que hay que bajarse.
Pero de verdad merece la pena... sobre todo en estos días en los que un rayito de sol se agradece tanto.
Pero de verdad merece la pena... sobre todo en estos días en los que un rayito de sol se agradece tanto.